Londres, 4 nov (Prensa latina) El mayor iceberg del mundo conocido como A68a mantiene hoy una trayectoria rumbo de Georgia del Sur, donde será una grave amenaza para los pingüinos y focas en ese territorio británico de ultramar.
Según el sitio AlertaGeo, las rutas normales de alimentación de los animales podrían ser bloqueadas, impidiéndoles alimentar a sus crías adecuadamente.
Todas las criaturas que viven en el fondo del mar serían aplastadas por A68a al llegar a tierra, una perturbación que tardaría mucho tiempo en revertirse.
De ese iceberg atascarse en esas islas podría estar allí durante 10 años afectando el ecosistema y la economía del lugar.
A68a se liberó de la Antártida a mediados de 2017, y ahora está a sólo unos pocos cientos de kilómetros de la costa, considerada un refugio de vida silvestre.
Ese territorio británico de ultramar -en opinión de los expertos- es una especie de cementerio de los icebergs más grandes de la Antártida.
El A68a – con una profundidad sumergida de 200 metros- tiene un tamaño aproximado al condado inglés de Somerset, con una extensión de cuatro mil 200 kilómetros cuadrados y pesa cientos de miles de millones de toneladas.
Puntualiza la fuente que sería un problema complejo para los pingüinos y focas durante el período de criar los cachorros y los polluelos, pues la distancia real que tienen que viajar para encontrar comida es mayor.
Al tener que dar un gran rodeo pudieran no poder regresar con sus crías a tiempo para evitar que se mueran de hambre en ese lapso.
Recuerda el artículo que cuando el coloso A38 encalló en Georgia del Sur en 2004, se encontraron incontables polluelos de pingüino y crías de foca muertos en las playas locales.